
Nuestra sección más querida de los viernes regresa super-recargada con una locura indie de proporciones épicas (¿?).
Por @diegui83
El embarazo es casi siempre una hermosa ocasión de toda mujer que se vive con total expectativa, pero también con miedos e inseguridades. Nada tan alejado de la vida de Lou (la gran Natasha Lyonne), quién se ve en una situación embarazosa (cuack!) cuando de repente se le va inflamando el vientre de una manera inusual. Para colmo de males, tiene varias lagunas mentales que no le dejan saber que pasó esa nefasta noche donde supuestamente fue concebida la vida en su interior. Todo conlleva a un raid de drogas e investigación que tiene mucho del cine de David Lynch: psicodelia, Generación X y un poco del gore del bueno al mejor estilo Takashi Miike.
El film de Danny Perez es una fotografía de los 90’s con la protagonista junto a su amiga, interpretada por Chloë Sevigny, bailando música y fumando y tomando todo lo que pueden. Para ir a su casa a dormir para luego repetir la secuencia día a día en loop.
Lyonne está fantástica en el papel de adicta-rocker-metida-en-un-lío como el que supo interpretar en la serie Orange Is The New Black, ya que ella misma en su vida ha tenido situaciones bastante jodidas. Y más allá de la situación extraordinaria que le toca vivir en este film, su personaje se toma las cosas de manera bastante prácticas, ya que su personalidad parece no dejarle lugar a lo paranormal.
Hombres de Negro, conspiraciones y un clima bastante de ensueño y LSD hacen de Antibirth la bizarreada más disfrutable de este año (hasta que llegue otra). Y si son fanáticos del cine de terror clásico, tendrán una grata sorpresa al final de la película.
- Título: Antibirth (2016)
- Director: Danny Perez
- Duración: 95 minutes
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