
La eminencia de la animación apunta a estrenar su próxima película para los Juegos Olímpicos del 2020 en Japón.
Por @RockaOnTheGo
Los dioses de la animación le sonríen a la humanidad. La cara del estudio Ghibli y del anime en occidente, Hayao Miyazaki, ya volvió de su retiro al empezar la producción de su nuevo film, esperando llegar a estrenarlo para los Juegos Olímpicos de 2020 en Japón.
Hace ya tres años había anunciado su retiro. En el año 2013 le hizo conocer al mundo que planeaba que The Wind Rises sirva como despedida a su ilustre y galardonada carrera. La cinta fue aclamada por la critica, algo recurrente para Hayao, siendo nominada para varios premios incluidos los Oscars y los Globos de Oro.
Por supuesto que todo el reconocimiento, más que merecido, del que goza el señor Miyazaki en occidente es en gran parte al éxito monumental que significo El Viaje de Chihiro en el año 2001. La historia sobre la titular Chihiro, una niña de 10 años que se encuentra atrapada en un peligroso y extraño mundo de fantasía, logró la proeza de ser la primera, y lamentablemente única hasta ahora, película de anime en ganar el Oscar a Mejor Película Animada. Destacando también por ser la única ganadora que fue animada con animación tradicional (a mano), convertirse en la película más taquillera en la historia de Japón (superando ese mismo año a Titanic) y lograr, incluso al día de hoy, colarse en listas de las mejores películas animadas de la historia, e incluso de películas en general.
Desde su retiro se mantuvo ocupado realizando algún que otro corto de animación, pero lo que parece haber despertado su espíritu fue ser testigo de la producción de La Tortuga Roja. El film es una co-producción francesa con el estudio Ghibli, del cual Miyazaki es miembro fundador, y esta nominada para los premios Oscars de este año. Destacada por no utilizar dialogo alguno, la película parece haber encantado a Miyazaki, ya que hubo reportes el año pasado sobre las ganas que tenia de probar cosas nuevas una vez había visto lo que se estaba logrando con La Tortuga Roja.
Miyazaki es garantía de muchas cosas: de visuales sin igual, de bellas historias, de un matrimonio perfecto entre realismo y fantasía, de protagonistas femeninas, de entretenimiento para un rango de edades mayor al que pueda brindar hasta el más inclusivo de los juegos de mesa, y de una calidad inigualable en la industria de animación o del cine en general. Por eso y por mucho más, no necesitamos más que su nombre para estar más que emocionados por el 2020.
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