
“No hay nada mejor que imaginar otros mundos para olvidar lo doloroso que es el mundo en que vivimos”
Baudolino – Umberto Eco
Por @mauvais1
Los hermanos Jacob y Wilhelm Grimm, lejos de las fantasías escénicas o fílmicas fueron grandes escritores e investigadores del pasado tradicional de su Alemania natal, llegando a ser considerados los fundadores de la filología alemana. Académicos, artistas plásticos y urbanistas, lejos de su fama mundial como cuentistas, son vistos como próceres de las letras germanas. Fueron tres ellos, Jacob, Wilhelm y Ludwig, pero los dos primeros con sus colecciones de historias del folclore nacional, lograrían traspasar los limites de su nación y convertirse en los padres de los cuentos de hadas, sin menospreciar al formidable Hans Christian Andersen. Y al alrededor de sus historias se tejerían, ahora sí, un sin fin de leyendas. Pero recién, hasta donde llega mi conocimiento, en 2005 el director Terry Gilliam tomaría a los hermanos y los incluiría en una ficcionalizada trama en que los tenía como protagonistas, como en 2012 Gustavo Monje y Giselle Pessacq pergeñarían «Los fabulosos Grimm».
Esta novedad dentro del estilo de cuentacuentos, proponía diferentes anécdotas de como ellos, los escritores se había topado con la historia que luego daría lugar a sus celebrados escritos. En esa linea, de reescritura de la realidad de los autores, Nicolás Pérez Costa escribió y dirigió Los Grimm. Apelando también a mezclar la fantasía folclórica de las historias con las vidas de ellos. Logrando un producto interesante, al hacerlo a través de un thriller policial.
Los Grimm según los Pérez Costa
La versión que se presenta toma a los míticos hermanos y propone hacer una metáfora sobre el sentido que los llevó a la pulsión de escribir sumergidos en un misterioso y mágico thriller de suspenso. Asesinatos, desapariciones, hechos confusos y extraños sucesos darán vida a una pieza que llevará al espectador a un viaje incierto, lleno de humor, misterio y emoción.
Es indiscutible el talento sobre las tablas de los hermanos Pérez Costa, en particular del polifacético Nicolás, alguien que entiende el manejo del escenario, con una inmensa capacidad vocal y actoral. Además de una equilibrada troupe en el elenco del que podríamos nombrar a una Victoria Stecca (Titulo del show – 2017) o en los aspectos técnicos como el diseño de vestuario de Fernando Crisci Munz (¿A quién le importa Gracy Sanders? – 2018). Todos ellos aunados logran un interesante evento que podría ser completo si el libro acompañara, ya que el mismo por momento cae en ciertos lugares comunes que se antojan ya manidos en este tipo de historias.
El thriller es una excelente proposición para la narración del descubrimiento de las historias, pero al mezclarse con la historia de ellos y su familia, se rompen en tantas anécdotas que se pierden en esa inmensidad que abarcan, dejando olvidadas a las heroínas de las narraciones y a los hermanos por igual. Un drama familiar, un pueblo con un asesino de serial de mujeres con características únicas, la idea en por demás intrigante y el resultado ameno. Pero en definitiva, y dejando de lado ciertas falencias en el guion, es una puesta llevadera, ágil y esmerada que vale la pena, así sea para ver el talento de los protagonistas y esos personajes que no dejan de generar magia y fantasía como son los Hermanos Grimm.
SABADOS 20.30 HORAS
TEATRO EL CUBO – Zelaya 3053.
“LOS GRIMM” UN MUNDO MAGICO DE NICOLAS PEREZ COSTA –
MUSICA ORIGINAL: PABLO FLORES TORRES
COREOGRAFIA: BARBY MAJULE
DIRECCIÓN: NICOLÁS PÉREZ COSTA
1 Trackback / Pingback