
Con un intento de comedia poco convencional y su familia siendo parte de la película, ya sea desde el elenco o desde la producción, Álvaro Urtizberea presenta “Radio Oriente”, su segundo largometraje.
Por @LucaKuretzky
Radio Oriente nos trae la historia de un pueblo que es comandado por Rafael, un empresario adinerado que tiene una radio, la cual quiere vender a unos empresarios orientales. En todo esto entra en juego Ramón, el encargado de la misma e hijo del electricista del lugar que murió intentando reparar la antena. Junto a su compañero Félix, toma la radio para evitar que se concrete la venta y descubrir la verdad detrás de la muerte, ya que se cree que Rafael fue responsable directo.
La película tiene como característica un clarísimo bajo presupuesto que le juega muy en contra. Se nota muchísimo en la primera escena que si bien era una muy buena idea arrancar con ese hecho (más aún sabiendo en el final lo que se escondía fuera de campo), está un tanto rara, desde lo visual y desde cómo suceden las acciones. Hay una clara problemática en esto porque algo que va a pasar a lo largo de los 97 minutos es que visualmente es penosa, por momentos inmirable e inentendible. Hay muchos planos con una clara sobreexposición de la luz y otros muy oscuros que no se pueden distinguir, desde la fotografía, también se puede destacar lo errado que están los colores.
Más allá de ese problema desde lo visual que ya descoloca el visionado de un film, las acciones se sienten todas forzadas y falsas, las actuaciones son de lo peor que tiene el largometraje de Álvaro. Todo lo que se ve se siente como un sketch de comedia de esos que solo pueden exhibirse en televisión o en YouTube, se podría llegar a pensar esto como una decisión más profunda del director ya que se vende como una comedia poco convencional, pero la realidad es que no hay ni una justificación dentro de la película. Van por dos lados distintos lo que los personajes viven y lo que se quiere hacer vivir, pierde peso la idea principal, porque el significado y la razón de un sketch es diferente al de una película, o puede que no, pero no es este el caso, desde el inicio se quiere generar otra cosa.
Lo que en realidad sucede es que se quiere hacer una imitación al cine de Wes Anderson. Desde los planos, desde lo visual y los colores, desde las actuaciones, desde la misma trama. Todo se quiere parecer a él, y ahí es en donde falla. Hay planos que están construídos con exactamente la misma idea que películas como The French Dispatch (2021) u otras de Anderson, pero es imposible que salga bien porque es un estilo muy propio que cuenta con un presupuesto mucho más gigante. No solo desde los planos simétricos que caracterizan al ya mencionado director de largometrajes como The Grand Budapest Hotel (2014), Asteroid City (2021) y Fantastic Mr. Fox (2009), sino desde algunos movimientos en las actuaciones o, como se mencionó antes, la construcción de un plano.
Sin ánimos de spoilear, el cómo se muestra la resolución absoluta de la película es también para criticar, ya que no le favorece para nada y no tiene ni un ápice de sentido que sea mediante los créditos. Una idea que engloba el mal de Radio Oriente, muchas más intenciones en el qué antes que en el cómo, y muchos disgustos desde la parte técnica.
PUNTAJE: 2/10
Título: Radio Oriente
Año: 2023.
País: Argentina.
Dirección: Álvaro Urtizberea.
Guion: Nicolás Espinosa y Álvaro Urtizberea.
Fotografía: Mauricio Heredia.
Producción: Vista Sur Films S.r.l
Elenco: Gonzalo Urtizberea, Marcelo Chirinos, Nicolás Espinosa, Violeta Urtizberea, Mex Urtizberea, Ximena Banús, Martin Policastro, Juan Isola, Camila Romagnolo y Denis Groesman.
El obediente jefe de limpieza de una emisora de radio de un pequeño pueblo se atrinchera en su interior para resistir la venta de dicha radio a un grupo mafioso oriental.
Hola, trabaje en esta pelicula. En cuanto a color, se trata de una propuesta de mucho contraste, por lo que si la ves en el cine la vas a ver bien. La viste en una compu o TV? deberias configurarlo a lo que s e ve en el cine. Es posible que tengas el contraste muy alto o mucho brillo, etc.