El nuevo thriller, protagonizado por Camila Mendes, escaló este fin de semana a lo más visto en Netflix, desbancando a «Misión de rescate», con Chris Hemsworth. Engaños, secretos, muertes, dinero y diamantes son los ingredientes de esta inquietante película.

Por @Gimei18

La nueva película de Netflix mezcla drama y suspenso de una manera acertada, atrapando al espectador durante todo su metraje. Desde su estreno el último 30 de abril, la película dirigida por Michael Scott, ha llamado la atención, escalando en el Top Ten de la plataforma de manera vertiginosa.

La trama gira en torno a Katie Franklin, una cuidadora que inesperadamente herede la inmensa fortuna de uno de un anciano que cuidaba. Una clásica historia sobre 2 personas aparentemente buenas e inteligentes que toman algunas tontas decisiones a partir de la avaricia.

Katie (Camila Mendes, Riverdale) y Adam (Jessie T. Usher, The Boys) son un matrimonio con problemas económicos. Katie comienza a trabajar cuidando a Leonard (Elliott Gould), un anciano que vive solo en una gran mansión. Poco después, Leonard muere y deja su casa a Katie. Antes de mudarse a este nuevo hogar, los jóvenes encuentran un baúl lleno de dinero. Y no fue lo único que el anciano dejó. La herencia que supuestamente sería una salvación, se transforma en una pesadilla.

La historia es un espiral de mentiras, engaños y secretos, que hacen que Katie sospeche de todos. A medida que avanzan los minutos, van creciendo las expectativas por saber lo qué pasará, y eso atrapa al espectador hasta saber el desenlace. Esto es mérito de Michael Scott, un efectivo director con trayectoria en telefilms. Esta vez, con un guion David Golden, no es la excepción. Es una típica película de streaming (lo que antes se decía: una película de canal de cable) para escapar un poco de la realidad, un thriller divertido y de suspenso.

Si esta película hubiese pasado por el cine, sería otro cantar: estaríamos hablando de las incoherencias del guion, de lo forzados de los protagonistas, y del final precipitado y torpe, intentando resolver mediante nuevos personajes que ni estaban en la historia, una narrativa tramposa. Pero en este caso, es una película cuyo propósito es echarse en el sillón, solo o en familia, y disfrutar un rato.

Las mentiras tienen patas cortas, asegura un dicho popular. Más todavía si son peligrosas como las que se cuentan acá. La trama contiene una espiral de intrigas y sospechas que te mantendrán frente a la pantalla hasta conocer el final. No es nada nuevo, pero tiene al espectador pegado a la pantalla de principio a fin. Buena para pasar el rato.

PUNTAJE: 5.5/10

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Título: Mentiras peligrosas (Dangerous Lies – 2020)

Dirección: Michael Scott

Guion: David Golden

Reparto: Camila Mendes, Jamie Chung, Sasha Alexander, Cam Gigandet, Elliott Gould, Jessie T. Usher, Garfield Wilson, Briana Skye, Trevor Lerner, Nick Purcha, Stefania Indelicato, Erika McKitrick

Para sorpresa de todos, un anciano millonario le deja su herencia a su nueva cuidadora, que se ve envuelta en una red de engaños y asesinatos. Si quiere sobrevivir, no puede fiarse de nadie, ni siquiera de sus seres queridos.