Diego Velázquez protagoniza «El maestro», una película que retrata la persecución a un maestro de primaria por los prejuicios de un pueblo salteño en los años noventa.

Por @joacods

El maestro se estrenó recientemente en la plataforma CINE.AR y cuenta con dirección compartida: Cristina Tamagnini y Julián Dabien. Tamagnini elige adaptar libremente la historia de su propio maestro de escuela, Eric Sattler, quién según la realizadora es además un «gran hacedor de cultura» en su pueblo Ucacha, en la provincia de Córdoba.

La producción nos presenta a Natalio, un maestro de nivel primario, preocupado por la educación de sus alumnos dentro y fuera del colegio, a cargo de su madre con quien nunca dejó de convivir. Podemos ver su interés por el bienestar de sus alumnos a través de la relación que entabla con Miguel, un niño que sufre bullying en el colegio y a quien Natalio ayuda extracurricularmente. El confort de Natalio se ve irrumpido por la aparición de Juan, un amigo que decide instalarse en el pueblo, relación por la cual todos los padres de los alumnos y el resto de sus vecinos comienza a especular y a conjeturar, ya que parecen no entender qué es realmente lo que sucede entre ambos, aunque muchos poseen sospechas sobre el maestro. Mientras tanto, Natalio comienza a preparar una adaptación teatral de «El principito» con sus alumnos.

La llegada de Juan y el hecho de que ambos comiencen a convivir en otra casa desata las acciones en un pueblo en el que todo parece dormido y en el cual todos parecen saber todo acerca de quien vive al lado, una realidad que suele darse en los pequeños pueblos de las provincias argentinas. Natalio no esclarece el vínculo con Juan más allá de referirse a él como «un amigo», algo que para un escenario como el descrito, situado temporalmente décadas atrás, resulta en el descubrimiento a flor de piel de los prejuicios y la discriminación de los habitantes.

El pilar fundamental sobre el que se sostiene la película es la actuación de Diego Velázquez sin duda, un actor que ha sabido personificar roles de diferentes estirpes y que no defrauda en este nuevo papel. El dolor y la desesperación ante una realidad que su personaje no puede modificar se encuentran registrados en sus caras y sus gestos y esto termina siendo clave a lo largo del desarrollo del film. Es una lástima que no podamos ver a Natalio dentro del aula, ya que la relevancia de la obra acapara casi todo su tiempo en la escuela y aunque si bien es entendible que la historia de la marginación sea la preponderante y la que se quiere contar, quizás el desempeño del protagonista dando clase a sus alumnos, hubiese aportado positivamente en el marco de contextualización. Donde sí lo vemos es organizando los ensayos de la obra, la cual cobrará una importancia vital en el desenlace del film.

Otra de las bases sobre la que se sostiene El maestro es la relación que establece con Miguel, a quien no solamente ayuda en sus tareas sino que apadrina, siendo un niño que encuentra dificultades para encajar por el maltrato que sufre y por ser diferente a lo que la masa espera de él. Aquí uno puede imaginar un paralelo con la historia verdadera de la realizadora con su maestro, sobre quien se basa el argumento.

Además, el largometraje maneja bien un elemento presente en casi todos sus personajes y que tristemente se mantiene a la orden del día en nuestra sociedad: el silencio. Cuando los padres comienzan a sospechar y a dudar acerca de la inclinación sexual de Natalio, la mayoría opta por recluirse en sus aprendizajes retrógrados y cargados de discriminación en un silencio que ve a todos los engranajes trabajando en ir excluyendo al protagonista de la historia. El contraste lo personifica Hugo, el novio de Susana (madre de Miguel y empleada en la casa de Natalio y su madre), en quien el odio del pueblo se concentra y se explicita en diferentes pasajes del audiovisual.

En líneas generales, El maestro es una buena película argentina que se suma a la nueva oleada de films que retratan relatos de diversidades y sus adversidades y que nos deja un final más que tajante para reflexionar sobre qué hemos cambiado concretamente como sociedad en estos 30 años, invitando al espectador a pensar si lo que se ve en pantalla realmente es algo que se ha dejado atrás o si es algo que sigue vigente.

PUNTAJE: 6/10

Título: El maestro

Dirección: Cristina Tamagnini, Julián Dabien

Guion: Cristina Tamagnini

Reparto: Diego Velázquez, Ana Katz, Ezequiel Tronconi, Valentín Mayor Borzone, Natalia Aparicio

Natalio es un apasionado maestro de pueblo del noroeste argentino que aún vive con su madre, una mujer posesiva. En su casa da clases particulares a Miguel, el hijo de Susana, su empleada, quien atraviesa situaciones de violencia en la escuela y con Hugo, la pareja de su madre. Natalio y Miguel crean un vínculo especial mientras crece la admiración de Miguel por Natalio.