[4B Recomienda] Coming of age: 8 films sobre la desastrosa pero feliz adolescencia

«Se que no es la respuesta a todo, pero es suficiente para encajar todas las piezas«.

The Perks of Being a Wallflower (2012)

Por @mauvais1

La adolescencia que muchos añoran y otros no ven el momento en que termine, tiempos de aprendizaje, que le dicen, y que solo son la primer prueba a superar. Una ardua, conflictiva y cargada de expectativas etapa de la que nadie puede librarse y que para cada uno de los damnificados es una aventura en solitario. La industria cinematográfica americana ha sido por excelencia un cultor de este establecido género con algunos aciertos como la celebrada y ya mítica The Breakfast Club (1985) o Lucas – La inocencia del primer amor – 1986. Pero ya en los cincuenta François Truffaut había compuesto un retrato que por mucho tiempo sería modelo en Les quatre cents coups. Género cinematográfico que sigue dando buenos títulos; Ghost World de Terry Zwigoff, la amada Boyhood (2014), las recientes y galardonadas Call Me By Your Name (2017) y Lady Bird (2017).

Pues hay más cine coming of age ahí afuera que podremos ver, en el que se retrata desde diferentes perspectivas ese difícil y para nada idílico paso de la niñez a la adultez.

Martín Rodríguez Redondo dirige Marilyn, la historia de Marcos, un campesino de diecisiete años que descubre su sexualidad en un ambiente hostil. Apodado Marilyn por otros adolescentes en la ciudad, se convierte en el objetivo tanto del deseo humano como de la discriminación. Marcos se siente empujado a una esquina cada vez más. Walter Rodríguez interpreta al adolescente que lidia con ese doble conflicto, la búsqueda no solo de su identidad, sino que también la hostilidad de quienes lo rodean. Historia inspirada en hechos reales.

A propósito de esto llega también la historia de Simón, basada en el best seller de Becky Albertalli; Simon Spier es un joven 16 años que no se atreve a revelar su homosexualidad, conflicto totalmente interno, ya que él cuenta con una familia comprensiva, de clase media alta, y amigos. Love, Simon de Greg Berlanti, es una mirada mucho más idealizada, cómplice y tierna.

Kayla, una niña de 13 años, tendrá que lidiar con los terremotos de la adolescencia suburbana en la última semana de colegio primario, tras un año desastroso antes de empezar la secundaria. El joven Bo Burnham escribe y dirige Eighth Grade, comedia que viene con muy buenas críticas y es protagonizada por Elsie Fisher. Ella quiere encajar y dejar una impecable imagen frente a sus compañeros, pero todo parece confabularse para que esto sea casi una epopeya…

El estilo puede cambiar pero en definitiva sigue contando ese catastrófico instante de la vida, que a veces para graficarlo de manera no solo más atractiva, sino que también contundente se vale de otros géneros. El despertar visto como un cuento fantástico o…

Every Day. Rhiannon es una adolescente de 16 años que se enamora de un misterioso espíritu llamado «A», que se despierta en un cuerpo diferente cada día. Sintiendo una enorme conexión, Rhiannon y A intentan verse, sin saber qué o quién les traerá el nuevo día. Cuanto más se enamoran el uno del otro, la idea de amar a alguien que es una persona diferente cada 24 horas empieza a pasarles factura, llevándolos a tomar una decisión que cambiará sus vidas para siempre. Esta historia es la adaptación de la novela de David Levithan, el mismo de Boy Meets Boy (2003) que dirige Michael Sucsy y protagonizan Angourie Rice y Justice Smith. Una fantasía que retrata la misma búsqueda de identidad, hasta sexual, desde una propuesta fantástica.

Lo revulsivo, inadaptado y rebelde que puede ser ese periodo de aprendizaje se valió de una larga lista de títulos literarios que optan por la ciencia ficción para retratar, The Hunger Games, Maze Runner, Divergent y ahora The Darkest Minds de Alexandra Bracken. Después de que una enfermedad matase al 98% de los niños y jóvenes de los Estados Unidos, el 2% que consiguió sobrevivir ha desarrollado superpoderes, pero se los ha encerrado en campos de internamiento al ser declarados una amenaza. Una de esas niñas de 16 años, Ruby, consigue escapar de su campamento y se une a un grupo de adolescentes que huyen de las fuerzas del gobierno. Fox quiere seguir la estela dejada por los antes nombrados y lo hace con la producción dirigida por Jennifer Yuh y protagonizada por Amandla Stenberg, Mandy Moore y Gwendoline Christie.

Jóvenes problemáticos que se largan a explorar el mundo, que necesitan conocer de primera mano eso que los adultos intentan mantener fuera de campo, porque lo oculto y prohibido seduce… Elijah Bynum escribe y dirige este drama sobre Daniel (Timothée Chalamet); un tímido adolescente que comienza a vender marihuana, entrando en un mundo tentador pero problemático. Pero los problemas comienzan cuando tiene una aventura con la hermana (Maika Monroe) de su socio (Alex Roe). Hot Summer Nights, sigue haciéndole inolvidables los veranos a Chalamet.

Anya Taylor-Joy y Olivia Cooke protagonizan esta comedia negra que escribe y dirige Cory Finley.  Thoroughbreds; el titulo serie traducido “Pura Sangre” y trata sobre dos chicas adolescentes de Connecticut que reavivan su amistad después de años separadas en la que una se convirtió en una pulida joven de clase alta y la otro en una marginada social. Lejos de parecerse logran tener algo en común, y es nada menos que un asesinato.

Derrapemos un poco volviendo un poco a la ingenuidad y la comedia absurda. Blockers, comedia dirigida por Kay Cannon que se mete en la pretensión de los padres por mantener ese status quo en la crianza de sus hijos, algo que aquí roza lo obsesivo y más aún cuando se trata de un padre y amada pequeña. Tres padres que se conocieron en el kinder de sus hijas se vuelven a encontrar doce años después, cuando éstas llegan a la adolescencia. A través de un software que permite espiar mensajes de texto, los padres interpretan los emojis que se envían entre ellas para deducir que las chicas han hecho un pacto: perder la virginidad durante el baile de graduación. Aterrados de inmediato comienzan una misión en la que intentarán detener que su plan prospere. Mientras ellas gritan eufóricas entre música y alcohol, los adultos las persiguen hasta infiltrarse en las fiestas en las que ellas están, causando mucha, pero mucha vergüenza ajena.