Alemania decide probar con algo similar a este «Stranger Things» que es tan popular en el resto del mundo… Pero quizás se les pasó un poco la mano.
Por @RockaOnTheGo
ACTUALIZACIÓN: NUEVO TRÁILER (ESTRENO EL 1 DE DICIEMBRE)
No hay algo más aterrador para cualquiera que tenga hijos que el prospecto de perderlos de vista y no tener idea de donde están. Cualquiera que les haya perdido de vista por más de unos minutos va a entender la desesperación que uno sufre cuando piensa en lo que pudo haber pasado, y es justamente este sentimiento familiar que la nueva serie alemana de Netflix busca generar en su audiencia.
No tenemos dudas de que el éxito de Stranger Things durante el año pasado haga que las etiquetas «terror«, «niños» y «sobrenatural» sean lo más buscado en las oficinas de Netflix. Que suerte para los alemanes que su proyecto parece ser el más interesante que encontraron, ya que les dio la chance de realizar la primera producción alemana del gigante de internet. La serie será de 10 capítulos, de una hora cada uno, y se estrenará (apropiadamente) para el invierno de los Estados Unidos.
Un par de chicos desaparecen en un pequeño pueblo alemán en los ’80 (obviamente), y esto desata no solo un infierno para sus familias sino que expondrá a la luz secretos que ninguno quería exponer al mundo. Aunque algunos detalles, la sinopsis y el concepto en general hagan ecos con Stranger Things la realidad es que el producto final por lo que se puede apreciar en el trailer va a diferir bastante, se ve un terror mucho más maduro y atmosférico en el trabajo de los creadores Baran bo Odar (director de la recomendada The Silence del 2010) y Jantje Friese.
Si hay algo que garantiza el trailer es mucha atmósfera, pesadez y un silencio sepulcral que siempre parece anticipar lo peor. Los movimientos de cámara parecen ser tan constantes como lentos, no tenemos dudas de que el director, Nikolaus Summerer, hizo su tarea y vio una y otra vez los trabajos de John Carpenter y Stanley Kubrick. Bueno, también garantiza bastante miedo ya que aun si la serie no termina estando a la altura de lo que promete, la realidad es que pocas cosas dan más miedo que escuchar alemanes hablando y gritando.
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