[REVIEW] Fugō Keiji Balance: Unlimited – El dinero, a disposición de la ley

¿Qué pasa cuando la ley no tiene que preocuparse por el dinero? En esta historia, dos detectives tan distintos como pueden ser, deberán trabajar juntos para resolver crímenes… aunque a veces golpeen muy cerca de casa.

Por @Caty90

Fugō Keiji Balance: Unlimited es el anime que viene dando que hablar. Partiendo de la base de la «pareja-dispareja», nos presenta a dos detectives de la policía de Japón quienes deberán descubrir cómo trabajar juntos… a pesar de no tener nada en común.

Por un lado tenemos a Haru Kato, un detective con principios que tuvo problemas un par de años atrás y ahora trabaja en una de las oficinas de la policía menos prestigiosas. Por el otro, tenemos a Daisuke Kambe, quien hace su aparición en pantalla llegando en un avión privado con su nombre grabado en oro al costado y chocando autos solo porque están en su camino.

De una, no son exactamente compatibles. Y que en el primer episodio Kambe deje a Kato caer de un puente levadizo al agua luego de evitar una explosión, bueno…no fue el mejor comienzo de la historia para estos dos. Pero como suele ser el caso cuando dos personajes son tan distintos, el paso de la historia nos mostrará que pueden llevarse bien o, como mínimo, trabajar mejor juntos de lo que cualquiera de los dos esperaría.

Los primeros episodios son totalmente independientes y nos ponen a los personajes y su equipo en perspectiva. Principalmente la Unidad de Crímenes Modernos, a la que ambos pertenecen (aunque nadie entiende por qué Kambe la elige), y la División N° 1, con la que se cruzan varias veces y a la que Kato solía pertenecer (aunque ahora los tratan como si fueran una vergüenza).

En esa división, destacan el Jefe Takei y el ex-compañero de Kato, Hoshino, mientras que en Crímenes Modernos resalta el Detective Nakamoto, a quien todos se refieren como Cho-san. Estos personajes, junto a la familia Kambe en general y a Suzue Kambe en particular, serán el centro de la historia cuando lleguemos al famoso caso principal, que además de secretos y mucha intriga, abarca, como suele ser costumbre, los últimos cuatro episodios de la serie (que inusualmente tiene 11 episodios y no 12 – típico número de las series más cortas -).

La serie es un buen balance entre cómica y seria. El uso indiscriminado del dinero saca de quicio a Kato episodio tras episodio mientras Kambe no tiene escrúpulos en aprovechar todas las herramientas a su disposición. Si él tiene dinero, ¿por qué no utilizarlo? Mientras Kato insiste que no se puede resolver todos los problemas del mundo simplemente pagándole a la gente, Kambe prefiere actuar primero y «pedir perdón» después (aunque probablemente no sepa lo que la frase significa).

El dinero sumado a la increíble herramienta que es HEUSC, el sistema computacional de la familia Kambe y que le permite acceder a toda la información del mundo, realizar transferencias bancarias millonarias en un abrir y cerrar de ojos, y que viene con un par de lentes que funcionan con un sistema de Realidad Aumentada que le permiten analizar el mundo alrededor según le parezca necesario.

Entre exasperación y cinismo, Kato y Kambe nos traen aventuras divertidas, con personajes que tienen mucho bagaje y uno o dos traumas  que resolver y demasiado orgullo para permitir que otros los ayuden. Pero a la hora de la verdad, incluso aquellos con intenciones más cuestionables o pasados más dudosos demostrarán que tienen algo que ofrecer, incluso si les cuesta la vida.

A pesar de haber sufrido, como tantas otras series, la pausa en su producción a causa de la pandemia (se pausó su emisión luego del segundo episodio por poco más de un mes), Fugō Keiji Balance: Unlimited (2020) supo interesar lo suficiente para que ese período en stand-by no lo dañara y hacerse de un par de fans en el interín.

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Título original: Fugō Keiji Balance: Unlimited

Dirección: Tomohiko Ito

Guion: Taku Kishimoto (Novelas: Yasutaka Tsutsui)

Música: Yûgo Kanno

Serie: 11 episodios.

Daisuke Kanbe es un millonario que usa su dinero para resolver casos de maneras poco convencionales. Kanbe se incorpora a la Unidad de Crímenes Modernos, una unidad creada para que los detectives problemáticos estén apartados del resto. Allí Kanbe conocerá a Katō, su nuevo compañero detective.