Llega a los cines la producción rusa sobre el infame desastre de Chernóbil, dirigida y protagonizada por Danila Kozlovskiy.

Por @mauvais1

He leído por ahí que es justamente este film con el que Rusia intenta (tal vez) responder a lo visto en Chernobyl, la producción de HBO de 2019. El titulo, desde el inicio, intenta ingenuamente diferenciarse de esa otra, la estadounidense que fue plataforma de denuncia como también de homenaje a los que participaron del hecho. Perspectivas, el asunto aquí entonces son las perspectivas.

No comenzaremos con el viejo proverbio de que «nadie es profeta en su tierra» para revisionar esta producción dirigida por Danila Kozlovskiy (conocido actor devenido en director) que escriben Elena Ivanova y Aleksey Kazakov, y que es un intento de reconstrucción del accidente de Chernóbil ocurrido en 1986, y que como la anterior mencionada intenta el retrato humano envuelto en la catástrofe, la historia íntima de los héroes que para muchos son anónimos, tanto los participantes de primera línea como bomberos y médicos, como los ciudadanos de a pie, habitantes de Prípiat.

Las similitudes terminan allí: Donde una denunciaba el transfundo político y mostraba en toda su magnitud el desastre, aquí se juega por una película del género catástrofe desde el comienzo, y con manual de este, desanda las peripecias de Alexey Karpushin, bombero de la ciudad, y Olga Savostina, la peluquera e interés amoroso de éste.

La llegada al desastre es a través de estos personajes, y su desarrollo tendrá como telón de fondo y marca simbólica justamente lo ocurrido en la planta nuclear. Desde el comienzo se plantea al héroe, esta vez de corte pedestre, es decir con actos menores de cobardía y presunción, que a medida que se involucra con su deseada pretendida, irá madurando su compromiso con el resto.

A su alrededor se teje el resto, ese que se escapa casi del cuadro, aunque insinuado, el manejo que las autoridades hicieron del siniestro y propone una mirada más de tono ficción cinematográfica, de asunto casi por fuera de las fuerzas humanas, que la condicionaron y fallaron en el intento de encapsular una fuerza que los sobrepasa. Hay escenas que representan estas búsquedas, como la del bombero Boris, en uno de los intentos de evacuar el agua de los depósitos subterráneos, que se queda observando el núcleo incendiado y resplandeciente, con atronadora música casi sacra de fondo. El hombre ante la maravilla de la naturaleza del desastre. Criatura que observa absorto en abismo al que el hombre en su afán se asoma y carga con la consecuencias.

La historia de Alexey, el joven y prometedor bombero, que cancherea a sus compañeros y, por si no fuera poco, prácticamente acosa a una ex-novia, posible madre de su hijo, es utilizada para distraer la atención, construir el mito del nacimiento del héroe, reconstruir, en la modernidad de la Rusia capitalista e individualista un héroe solitario, que una y otra vez se juega el pellejo por su amada, por el niño, y en definitiva por todos.

Danila Kozlovskiy intenta el homenaje a los que intervinieron en el siniestro, darles profundidad a sus historias en aras de involucrar al espectador. Intenta centrarse en ellos, los combatientes, y es por eso que también hay otros, que descarta como hitos, emulando a los «Disaster film». Pero a diferencia de ese, lo coral del asunto se trastoca porque aquí el resto del elenco no tienen rostro o historia, son solo fortuitos, con este Alexey yendo una y otra vez a salvar el día. Casi parece una ironía la película, un solo hombre para todo, uno que tiene intensiones sobre sus hechos, búsquedas personales, sinsabores propios. Los muertos se apilan a su alrededor anónimos, insustanciales y entonces el siniestro en su magnitud humana se reduce. Lo vivenciado por los protagonistas es casi una historia de sobrevivencia solitaria.

De cuidada producción no hay duda alguna, la construcción que hace la Rusia soviética es colorida y activa, rocanrolera y pacífica, y hasta muestran a un solo hombre diciéndole «no» a las autoridades sin consecuencias. Es como el idílico recuerdo de alguien, y como tal plagado de prejuicios y rehuidas.

PUNTAJE: 5/10

• Estreno: 21 de octubre en salas argentinas.

Título: Chernóbil: La Película (Chernobyl – 2021)

Dirección: Danila Kozlovsky.

Guion: Elena Ivanova y Aleksey Kazakov.

Fotografía: Kseniya Sereda.

Reparto: Danila Kozlovsky, Oksana Akinshina, Filipp Avdeev, Ravshana Kurkova, Nikolay Kozak, Igor Chernevich, Artur Beschastnyy, Nikolay Samsonov, Anton Shwartz, Andrey Archakov y Samvel Tadevosian.

Alexey, un bombero en la central eléctrica, es acompañado por Valery, un ingeniero, y Boris, un buzo militar, en una peligrosa misión para drenar el agua del depósito debajo del reactor en llamas.