En esta oportunidad, les traemos dos films animados chinos con mucho punch y mucha historia.
Por @Caty90
Cuando pensamos en animación, dos opciones vienen automaticamente la cabeza: Disney y Anime. ¿Hay otras opciones? Sí. ¿Son sinónimo de animación? Lamentablemente, no. Y es de verdad una lástima lo poco conocidas que son algunas producciones. Aunque cabe destacar que con las plataformas online, habilitando un poco más de espacio para la llegada de títulos no tan conocidos, este último punto ha empezado a cambiar un poco.
Entre estas películas, podemos encontrar la prolífica producción china. En particular, el caso de los dos largometrajes que son el foco de este artículo: Ne Zha (2019) y Nezha: El Renacer de un Dios (2021). Con muy poco tiempo entre una y otra e inspirándose en la novela del siglo XVI La investidura de los dioses a pesar de no estar conectadas entre sí, ambas producciones son un claro ejemplo de lo que podemos encontrar en otros circuitos fílmicos y con una calidad narrativa y de animación incomparable. Pero revisemos un film a la vez.
Por un lado, Ne Zha (2019) nos trae un cuento mitólogico antiguo, donde los espíritus y los demonios eran un solo ente (al estilo el yin y el yang) que acumulaba poder a pasos agigantados y creaban problemas y conflictos en el mundo con su mera existencia. Los dioses deciden separarlos y destruir al lado demoníaco mientras deciden ayudar a una pareja de caza monstruos con un hijo bendecido por el lado espiritual. Las cosas, como siempre, nunca salen como se planean y el chico resulta «bendecido» por el lado demoníaco.
A diferencia de lo que uno puede esperar con una premisa así, la atmósfera general de la película tira más para lo relajado y gracioso. Tenemos al monje encargado de cuidarlo y enseñarle, que es el estereotipo gordo, relajado y bonachón, los padres que aman al chico a pesar de todo y a Ne Zha mismo, que es el típico personaje picaresco, que a pesar de todo, es más un chico bromista que un ser de mal.
Aún así, el pueblo no lo aprecia demasiado y se siente solo e aislado. Eso sin contar que, por ser la encarnación del lado demoníaco de ese ente original, está destinado a ser destruido por una serie de rayos enviados desde el cielo por los dioses. Pero nadie quiere ser simplemente eliminado y el destino tiene más cosas en la bolsa para este chico travieso y su familia. Una combinación muy divertida de buena animación, mucho color y personajes entrañables.
Por otro lado, y como resultado del final del primer film (aunque ambos pueden verse independientemente del otro ya que fueron hechos por diferentes compañías y equipos creativos), tenemos Nezha: El Renacer de un Dios (2021). En este caso, saltamos hacia el futuro unos tres mil años y nos encontramos en una ciudad donde el agua escasea y es controlada con mano de hierro por el «gobierno». Aquí tenemos a un jóven que sobrevive como puede, no se entiende con su padre y, de un día para otro, se da cuenta que tiene poderes de fuego.
En este caso, hacemos un giro de 180° casi en todos los sentidos. La historia se enfoca en un personaje más adulto (aunque igual de inmaduro) que compite en carreras callejeras y contrabandea agua. La estética es mucho más oscura, aunque sin ser de esos films en los cuales ver qué pasa en la pantalla parece algo poco importante. Y la narrativa nos lleva por el camino de la redención junto a nuestro protagonista: Li Yunxiang, quien descubrirá a los golpes que es la reencarnación del dios Ne Zha (sí, han cambiado algunas cosas con el tiempo, aunque no tanto, ya verán).
El mundo ya no es controlado por los dioses de la primera entrega. En cambio, el nuevo órden va de la mano de los dragones, que son algo así como una mafia. Una mafia que, ¡oh casualidad!, Yunxiang hace enojar. Entre ida y vuelta, una pelea se desata entre uno de los hijos del líder y nuestro protagonista. Todo se va por el caño y para sorpresa de pocos, Ne Zha se hace presente. Un gran dios todopoderoso revive y más de una cosa va a cambiar por ahí.
A quienes les gusta la animación, con estas dos películas no la erran. Ya busquen algo más light (hasta ahí) como Ne Zha (2019) o quieran algo más rock & roll con un estilo medio reminicente de la onda steampunk como lo es Nezha: El Renacer de un Dios (2021), China dice presente con su producción animada y nos trae dos films que valen su peso en oro.
Be the first to comment