A cuatro episodios del final de temporada, los personajes van llegando a sus destinos, no sin antes encontrar peligros y sinsabores.

Por @ElPatoAlvarez_

ATENCIÓN: ESTA REVIEW PUEDE CONTENER SPOILERS DEL EPISODIO MENCIONADO. ENTRAR BAJO ABSOLUTA RESPONSABILIDAD

Todas las series habidas y por haber tienen su episodio » de relleno», ese que le da cierta calma antes de la tempestad en la trama. Westworld no se queda atrás y, si bien disfrutamos el episodio anterior con este nuevo mundo de samurais, creo que tanto ese como éste poco tuvieron que ofrecer al espectador, en cuanto a misterios que poco van revelando y una trama que no para de dar vueltas en sí misma.

Dolores finalmente tiene a su Teddy 2.0, un ser sin sentimientos, casi una versión de robot sin autonomía. Pero, ¿era eso lo que quería Dolores? A juzgar por su expresión al verlo no parece tan convencida de los cambios. Quien sabe qué esperaba. Sin embargo ya obtuvo lo que quería, un lugarteniente competente y totalmente fiel. Y si hablamos de «fidelidad», ¿qué nos dice esa escena de la charla entre Bernard y Dolores? Esa conversación la tuvieron siempre pero, ¿es acaso el Bernard que todos conocemos? Ahora Dolores se manifiesta como la que lleva el diálogo, con una prueba de «fidelidad» (de nuevo) hacia un anfitrión. ¿Será alguna versión del científico o quizás otra conciencia infiltrada en un nuevo Anfitrión?

Por otro lado, Charlotte logra contactar con los responsables de la seguridad del parque al capturar a Peter Abernathy y todo lo que eso conlleva: la guerra para la salvación de los humanos en el parque junto con el rescate de Dolores para con su padre ha comenzado; y no hay mejor cosa que utilizar sus herramientas en contra: el tren, símbolo de los sueños de libertad parece que finalmente se convirtió en un arma para tal propósito revolucionario.

Maeve y su banda logran llegar a su antigua casa en la pradera (luego de cerrar el círculo en el «Shogun World») y, como era de esperarse, su hija no la reconoce ya que obtuvo una nueva madre gracias a una nueva trama. Claro que no todo es tan fácil: la «Nación Fantasma» hace su aparición en el escenario y, además del caos, el líder habla con Maeve y le dice que sus caminos son iguales. ¿Qué significa todo esto?

WIlliam logra tener una conexión con su hija y, aunque en primeras instancias cree que es un Anfitrión y otro eslabón en el juego de Ford, logran conectarse…claro que pos un solo y breve momento: cuando tuvo la oportunidad, siguió su camino hacia el destino que lo está esperando. Vemos aquí que el Hombre de Negro no va a flaquear ante su cometido y, tal como dice Maeve, «Todos merecemos elegir nuestro destino, aunque ese destino sea la muerte».

Y una revelación final, que si bien ya la adelantamos y sopechábamos, fue fuerte igualmente: Robert Ford sigue vivo y en la piel de Anthony Hopkins en la base de datos inmensa que Elsie y Bernard entran. Una base que está tomando conciencia propia, más allá de que alguno de los Anfitriones ya lo ha hecho, es toda una revelación que solo una, «La Cuna», sea quizás la responsable de una trama más oscura y compleja. Quizás todo sea parte de una gran juego que nunca termina, sino en caos.

COMENTANOS QUÉ TE PARECIÓ ESTE EPISODIO DE «WESTWORLD» Y SI TE SORPRENDIÓ LA APARICIÓN DE FORD

ELENCO:
	Evan Rachel Wood	…	Dolores Abernathy
	Thandie Newton	…	Maeve Millay
	Jeffrey Wright	…	Bernard Lowe
	James Marsden	…	Teddy Flood
	Tessa Thompson	…	Charlotte Hale
	Ingrid Bolsø Berdal	…	Armistice
	Clifton Collins Jr.	…	Lawrence
	Luke Hemsworth	…	Ashley Stubbs
	Katja Herbers	…	Grace
	Louis Herthum	…	Peter Abernathy
	Simon Quarterman	…	Lee Sizemore
	Talulah Riley	…	Angela
	Rodrigo Santoro	…	Hector Escaton
	Angela Sarafyan	…	Clementine Pennyfeather
	Shannon Woodward	…	Elsie Hughes