[REVIEW] Spider-Man: Sin Camino a Casa

La tan esperada tercera entrega de la saga de Spider-Man protagonizada por Tom Holland finalmente hace su debut y aquí les comentamos (sin spoilers) qué nos pareció.

Por @Nicolas_S91

Tal y como sucedió en su momento con Avengers: Infinity War y Avengers: Endgame, Spider-Man: Sin Camino a Casa tenía la difícil tarea de estar a la altura de las expectativas. Pero a diferencia de las demás, esas expectativas eran creadas casi pura y exclusivamente por parte de los fanáticos, ya sea a raíz de teorías, deseos o filtraciones. ¿Cómo cumplir con cosas que uno no promete? Casi sin darnos cuenta, el cierre de la trilogía que comenzó en 2017 con Spider-Man: De regreso a casa se había metido en un terreno indeseado y peligroso. Sin embargo, nos complace anunciar que no hay de qué preocuparse porque esta película está lejos de decepcionar.

La campaña de marketing de este, el largometraje número 27 en el Universo cinematográfico de Marvel, fue de lo más inusual. Sin desmerecer a los profesionales, podríamos decir que gran parte del trabajo lo hicieron las redes sociales. No sabemos cuál fue el origen de las filtraciones (¿habrán sido ellos mismos?), pero incluso desde antes de que se conociera el primer avance, la maquinaria ya estaba a toda marcha y sin parar… Hay cosas que parecían demasiado buenas para ser verdad, los actores fueron consultados una y otra vez al respecto, pero nada salía a la luz de manera oficial. Muchos queríamos creer, aunque había un manto de duda envolviendo todo y la realidad era una sola: Hay que ver la película para comprobarlo por uno mismo.

Lo único que sabíamos a ciencia cierta es que por primera vez en la historia cinematográfica de Spider-Man, nuestro amigable héroe está desenmascarado y ya no puede separar su vida normal de la de ser un superhéroe. Cuando le pide ayuda al Doctor Strange, lo que está en juego se vuelve aún más peligroso con el surgimiento del multiverso. Si bien en la pantalla grande ya habíamos explorado este concepto por medio de la excelente cinta animada ganadora del Oscar® Spider-Man: Un nuevo universo (2018), verlo puesto en marcha en live-action y trayendo a personajes de la trilogía de Sam Raimi (2002-2007) y la duología de Marc Webb (2012-2014) es otro tipo de deleite, en el cual entra en juego el factor nostalgia, cada vez más presente hoy en día.

Gran parte del mérito de esta producción se debe justamente a lo que vino antes, en pararse sobre lo que otros construyeron, y honestamente hay que reconocer que hace un excelso trabajo en honrar el pasado sin dejar de mirar al futuro. No habría sido ni remotamente sorprendente si esta película fuera un completo desastre, porque juntar tres universos cinematográficos de Spider-Man y al mismo tiempo finalizar esta trilogía sin perder el eje central no es tarea fácil.

Tom Holland merece un párrafo aparte. El joven actor británico ya ha demostrado ser un Spider-Man fantástico (no entraremos en la discusión de si es el mejor porque cada uno tiene su favorito y cada uno tiene sus puntos a favor o en contra), pero Spider-Man: Sin Camino a Casa cuenta con un arco argumental para Peter Parker que le otorga a Holland las mayores oportunidades de muestreo actoral hasta la fecha dentro del UCM. Gran parte del film se centra en Peter reconociendo las consecuencias de sus acciones, equilibrando su ingenuidad bien intencionada con el crecimiento personal necesario para mejorar sus vidas y las de quienes lo rodean, y Holland ofrece una interpretación notable que sin duda lo termina de consolidar.

Por otro lado, si pensaban que Avengers: Endgame era una fiesta de fan-service, Spider-Man: Sin Camino a Casa hace un esfuerzo agresivo para superarlo y no se queda atrás, utilizando el multiverso a su antojo y beneficio. No todos los personajes reciben el mismo trato, de ninguna manera, pero es enormemente satisfactorio volver a ver a Doc Ock (Alfred Molina), mientras que Electro (Jamie Foxx) finalmente se redime después de su tratamiento mediocre en The Amazing Spider-Man 2 (2014). Y no alcanzan las palabras para definir lo que nuevamente logra Willem Defoe con su (aún más) terrorífico Duende Verde. Tenerlos de regreso a todos, y que la gran mayoría, o por lo menos los que más nos importan, reciban un tratamiento adecuado sin caer en el síndrome de la sobrepoblación de villanos que ya hemos visto anteriormente es un sueño hecho realidad y la prueba de que era posible lograrlo. Sin embargo, de a momentos resulta extraño observarlos dentro de las paredes del Universo Cinematográfico de Marvel y con otro tipo de humor que tal vez no encaja del todo con la imagen que teníamos de ellos.

En síntesis, Spider-Man: Sin Camino a Casa es esencialmente una carta de amor al personaje y a todo lo que este representa, una celebración a su legado y un punto cúlmine en la historia de Spidey dentro del UCM. Quienes sean fanáticos o tengan algo de cariño hacia él, sin dudas disfrutarán de esta película, la cual marca el cierre de una etapa y el comienzo de otra muy emocionante. Sin dudas es un gran momento para ser fanáticos del amigable vecino arácnido.

PUNTAJE: 9.5/10


Título: Spider-Man: Sin Camino a Casa

Título original: Spider-Man: No Way Home

Año: 2021.

Duración: 148 min.

País: Estados Unidos.

Dirección: Jon Watts.

Guion: Chris McKenna, Erik Sommers. Cómic: Steve Ditko, Stan Lee.

Música: Michael Giacchino.

Reparto: Tom Holland, Zendaya, Benedict Cumberbatch, Marisa Tomei, Jamie Foxx, Tony Revolori, J.K. Simmons, Angourie Rice, Alfred Molina, Willem Defoe, Jacob Batalon, Jon Favreau, J.B. Smoove, Hannibal Buress y Martin Starr.

Acerca de Nicolás Socci 1741 Articles
Periodista, cinéfilo, fanático de Dragon Ball, Star Wars y La Dimensión Desconocida.