Lo que parecía imposible hace no mucho tiempo atrás, hoy es una realidad. Ha arribado a Disney+ la serie Ahsoka que sigue a la protagonista homónima en sus travesías a lo largo de la galaxia. Es la concreción de una hermosa expansión del universo Star Wars que se inició hace exactamente quince años, en formato animación, con «The Clone Wars» (2008), continuó con «Rebels» (2014) y hoy condensa en este show. Y, como no podía ser de otra forma, el principal responsable detrás de todo esto no es otro que Dave Filoni (gracias Dave por existir). Adentrémonos pues en este nuevo viaje intergaláctico.
Por @joacods
Es difícil de explicar desde un único ángulo cómo es que un personaje que ha sido negado históricamente como canon del mundo de Star Wars, ha logrado hacerse con una serie de TV propia. La realidad de la situación es que el caldo se ha cocido lento y ha pasado más de una década desde que Ahsoka debutó en The Clone Wars (2003) —la película— , más precisamente, quince años. Es innegable que las redes sociales han aportado su grano de arena, sin duda, han sido el medio a través del cual los fans se han manifestado al hartazgo en apoyo del arco argumental iniciado por The Clone Wars: tal ha sido el impacto del recibimiento, que cuatro años después de la sexta temporada, a Disney no le quedó otro remedio que coronar el show con una última temporada.
Un año después, Star Wars incursionó en el mundo de las series live action con The Mandalorian (2019-). La historia es reciente y bien conocida, la apuesta se configuró como el mayor éxito de la franquicia desde el Episodio III: La Venganza de los Sith. Hoy, la historia de Din Djarin cuenta con tres temporadas en su haber y además de Ahsoka, otro spin-off: The Book of Boba Fett (2022). Tan grande ha sido el éxito de estos productos televisivos que gracias a ellos hemos podido disfrutar de otras series situadas en diferentes tiempos y espacios, como Obi-Wan Kenobi (2022) y Andor (2022-).
Pensando este universo televisivo ya como una cadena estratégica de buenas decisiones creativas, es difícil imaginarlo de manera fragmentada. Así es que debemos retrotraernos a los inicios de este camino y ponerle nombre y apellido a los responsables de todo esto: el nombre de Dave Filoni no es nuevo, es el genio detrás de Clone Wars y de Rebels. Su proeza ha sido tan importante que le ha valido hacerse con el cargo de Director Creativo Ejecutivo de Lucasfilm. El trabajo le ha rendido frutos a Filoni y afortunadamente tiene la posibilidad de contornear definitivamente la historia que comenzó a desarrollar en The Clone Wars y que hoy sigue vigente en Ahsoka. La nobleza obliga y debemos darle crédito también a su mano derecha en todo este gigantesco acierto: Jon Favreau. Su asociación es indiscutiblemente otra de las claves (sino la más importante) que han hecho posible este andamiaje, donde hemos visto el regreso de viejos conocidos (Ewan McGregor, Hayden Christensen, Temuera Morrison, etc.) que han tenido su merecida redención y la incursión de inéditos personajes que no han hecho más que enriquecer un universo expandido hoy más que nunca en la historia.
Enfocándonos ya en el show que nos atañe en esta oportunidad, es necesario decir que Ahsoka es todo lo que uno podía esperar de Filoni y compañía y más. Luego de ciertos altibajos narrativos en la última entrega de The Mandalorian y en The Book of Boba Fett, desde Lucasfilm parecen haber aprendido la lección: la historia que atraviesa a la serie es un único hilo narrativo que no corre el foco para perderse en subtramas lagunosas sino que no hace más que empeñar todo su tiempo en la trama que quiere desarrollar. El tiempo es tirano y los ocho episodios con los que cuenta Ahsoka, de aproximadamente cincuenta minutos cada uno, dan muestra de este aprendizaje. El show continúa el final de Rebels y a su vez, lo sugerido en la aparición de la protagonista en The Mandalorian: en medio de la caída del Imperio y de la creación de la Nueva República, el resurgimiento del General Thrawn es inminente y es por esto que Ahsoka debe reunir a la crew fantasma que ha sobrevivido (Sabine Wren y Hera Syndulla) luego del sacrificio de su amigo Ezra Bridger, presuntamente desaparecido en acción junto con el líder militar, para así evitar un nuevo enfrentamiento bélico de magnitudes catastróficas.
Los años han pasado y el tiempo le ha sonreído a los fans y también les ha dado la razón. De igual que sucedió con el brevísimo cameo de John Krasinski como Reed Richards en Doctor Strange in the Multiverse of Madness (2022), los empresarios han hecho caso del antiquísimo fan casting de Rosario Dawson como Ahsoka. Esto no es nuevo, ya hemos visto a la experimentada actriz encarnar al personaje de manera excelente en The Mandalorian y tal como se esperaba, la tendencia no se modifica en su propio show. Dawson es Ahsoka y siempre lo será y afortunados son nuestros ojos que han podido disfrutarlo una vez más. Se nota en el aire el lazo especial que une a la actriz con el personaje, del cual se ha apropiado y del que difícilmente pueda ser separada en tiempos venideros. Pero Dawson no está sola y la acompañan con impecables performances Natasha Liu Bordizzo (Sabine Wren) y Mary Elizabeth Winstead (Hera Syndulla), además del querido David Tennant volviendo a aportar su voz para el droide Huyang, una vez más luego de su participación en Clone Wars. También se hacen presentes el recientemente fallecido Ray Stevenson como Baylan Skoll, en su última interpretación, un conflictuado usuario de la fuerza y su aprendiz, Shin Hati, en la piel de Ivanna Sakhno. Además de ellos, hay lugar para grandes sorpresas que su honorable servidor se niega a arruinar.
Ahsoka no sólo sabe trabajar con los tiempos televisivos sino que logra apelar a esa intriga de la entrega semanal que el formato parecía haber dejado atrás. Organiza su esqueleto de una manera dúctil y simple, sin enroscarse en entramados complejos que sería imposible resolver en tan poco tiempo. Hace alarde de su autoconciencia y se sabe portadora de la antorcha que ilumina el camino de la Fuerza en la actualidad pero justamente esa es una de sus destrezas: reconoce cuando debe viajar a la velocidad de la luz pero también cuando debe detenerse en la inmensidad del espacio porque es necesario para lo que desea contar. Así es como conocimos estas historias y por eso mismo así merecemos que nos las cuenten. Vuelven en este show personajes celebrados por sus apariciones en otras instancias y también planetas e historias que no han hecho más que perfeccionar el universo de Star Wars. Todo en Ahsoka está en pos de la historia principal, ninguno de los apartados técnicos hace ademán de exceso por sobre lo que se narra: cada uno de los sectores responde a lo narrado, y en todos se logra lo excelso.
¿Qué es Star Wars sino una historia del balance de fuerzas, del equilibrio entre el bien y el mal? Ahsoka ha sabido profundizar este concepto, aprovechando lo mejor de lo viejo y de lo nuevo en la franquicia, apelando a sus fans más inquebrantables pero invitando a nuevos aspirantes a ser parte de este hermoso y autoregenerante universo. Las puertas están abiertas para quien se quiera unir. Que la fuerza los acompañe.
Título: Ahsoka
Creador: Dave Filoni.
Dirección: Dave Filoni.
Guion: Dave Filoni, Steph Green, Peter Ramsey, Jennifer Getzinger, Geeta V. Patel, Rick Famuyiwa.
Música: Kevin Kiner.
Fotografía: Eric Steelberg.
Reparto: Rosario Dawson, Natasha Liu Bordizzo, Mary Elizabeth Winstead, Ray Stevenson, Ivanna Sakhno, Diana Lee Inosanto, David Tennant, Eman Esfandi, Evan Whitten, Genevieve O’Reilly, Ariana Greenblatt.
Producción: Lucasfilm.
Distribuidora: Disney+
El Imperio Galáctico ha caído y una nueva República se ha constituido. Ahsoka Tano (Rosario Dawson), una togruta y antigua jedi padawan que fue instruida por Anakin Skywalker en el período de las Guerras de los Clones, investiga una nueva amenaza que se cierne sobre la galaxia.
Be the first to comment